Los gatos son muy dormilones, los únicos que están activos la mayor parte del día son los gatitos jóvenes. El resto del tiempo se autoacicalan, cubren sus necesidades básicas y juegan si les apetece. Te los puedes encontrar durmiendo en cualquier parte de casa, sobre todo en lugares que da el sol, sitios cálidos o escondidos.
¿Dónde?
No hay ningún problema en dormir con nuestro gato, ya que si está bien cuidado y desparasitado no supone ningún riesgo para nuestra salud. Hay que tener en cuenta que por la noche se muestra más activo por lo que puede dificultar nuestro descanso. En cualquier circunstancia, debes dejarle acceso al arenero y al agua. Antes de ir a dormir lo puedes cansar jugando con él un rato para reducir sus ganas de actividad por la noche.
Dormir con tu gato depende de ti y de las preferencias del animal, ya que puede preferir dormir por su cuenta. Si nos encontramos en este último caso, debemos disponer de una buena cama para el gato. Si le dejas dormir contigo cuando tú quieres, el animal no lo entenderá y maullará toda la noche.
Aunque no duerma en nuestra cama ni en nuestra habitación, es bueno dejar la puerta entreabierta para que sienta que estamos ahí, sobre todo en los gatitos recién adoptados.
Es importante no encerrar a tu gato para dormir, esto le puede producir estrés, ansiedad y malestar, a demás puede perder la confianza contigo.
Consejos para elegir una buena cama
- Debe ser de un tamaño adecuado.
- Deberás ponerla en altura y no sobre el suelo.
- La temperatura de la casa también influye, ya que en pleno verano no querrán usar una cama de borreguito.
- Es importante que sea lavable con facilidad.
Las camas “Cat Cuby” que tenemos disponibles en Pampermut son ideales para cualquier época del año, ya que se podrá acurrucar en el borreguito siendo una cama cueva y también podrá descansar sin el borreguito y con la cama abierta, gracias a que la parte superior es movible.
Ubicación de la cama
Debes tener muy en cuenta la ubicación de la cama. Las zonas de un gato, para su bienestar, deben distribuirse en distintas zonas separadas entre ellas.
- Zona de eliminación: donde se ubicará el arenero, es importante que sea un lugar tranquilo y alejado del centro de la casa.
- Zona de alimentación: espacio destinado a la comida y el agua. Debe estar siempre al alcance de nuestra mascota.
- Zona de descanso: debe estar separada del arenero y del comedero. Generalmente prefieren que estén en alto, pero lo mejor es observar las preferencias de tu gato.
- En otros espacios de la casa puedes poner rascadores, juguetes etc., para que pueda realizar todas sus actividades.
