El pienso es la opción más conocida para alimentar a nuestras mascotas por su comodidad, facilidad de uso y conservación, y su coste más económico que otros alimentos. De normal, la mayoría de perros aceptan esta comida perfectamente, pero puede haber algún caso en que se rechaza.

En cachorros

A partir de las 4-5 semanas ya pueden empezar a comer alimentos sólidos, pero deben ser específicos para esta etapa. Aun así, el destete debe realizarse de forma progresiva para que no aparezcan problemas de aceptación.

Un cachorro no podría comer pienso por:

  • Tránsito inadecuado: El cambio de la leche al pienso debe ser de manera progresiva. Los cachorros no deben separarse de su madre hasta que puedan comer por si solos y acepten la alimentación sólida.
  • Presentación incorrecta: Puede que no esté preparado para comer alimentos duros y necesite un alimento más blando.

En perros adultos

Primeramente se debería descartar cualquier patología física o psíquica. Si nuestro perro está sano y come otra comida, es decir, alimento húmedo, sin problemas, quiere decir que no quiere pienso.

Aun así hay otros motivos:

  • Selección desacertada: Si elegimos un pienso de baja calidad o simplemente que no le guste a nuestra mascota puede generarle rechazo.
  • Modificación de la dieta: Si le cambiamos la dieta saltándonos el periodo de adaptación, es probable que lo rechace.
  • Dieta mixta: Cuando aparte del pienso, le damos comida casera, puede rechazarlo porque le apetece más la otra comida. Dándole esta comida podemos estar cubriendo todas las calorías que necesita nuestra mascota y luego no tenga hambre para el pienso. Esta dieta solamente es correcta si cubre todas las necesidades de nuestra mascota.
  • Demasiada comida: Puede ser que deje comida porque le estamos dando más cantidad de la que debería comer. Se debe seguir las instrucciones del fabricante para saber la ración que tiene que comer nuestra mascota.

¿Qué hacer?

  • Ofrecerle pienso de manera progresiva, debes incrementar poco a poco la cantidad y así disminuir la dieta antigua.
  • Elegir un pienso de calidad, ya que es importante escoger un pienso en función de las características de nuestra mascota y sobre todo, tener en cuenta la etapa de la vida en que se encuentra. En Pampermut ofrecemos una gran variedad de piensos de alta calidad, aquí puedes encontrar el que mejor encaje con tu perro.
  • Como ya hemos comentado, se deben seguir las instrucciones del fabricante para darle la cantidad adecuada de pienso a nuestra mascota.
  • Respetar el horario de comida, ya que ellos tienen muy en cuenta la rutina. Puedes ofrecerle comida 1 o 2 veces al día.
  • Pon la comida en su comedero y espera como máximo media hora, pasado este tiempo retira la comida y espera hasta la próxima toma. En la siguiente puede comer la proporción que le toca y la que dejó.

Si tu perro sigue sin querer comer pienso, acude al veterinario para comprobar que su salud no corre peligro, sobre todo si el pienso que no quiere comer forma parte del tratamiento de una enfermedad.

Si tu perro está completamente sano y simplemente no quiere comer pienso, puedes intentar mezclárselo con comida húmeda, que puede ser más apetecible para su paladar.

También puedes ofrecerle una dieta BARF adaptada a sus necesidades y características. En Pampermut tenemos diferentes menús, seguro que encuentras el que mejor encaja con tu perro.

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